
El acero resistente al calor puede mantener un buen rendimiento en entornos de alta temperatura sin la adición de varios elementos de aleación. Estos elementos juegan un papel único en la mejora del rendimiento del acero resistente al calor.
El cromo (CR) es un elemento clave en el acero resistente al calor que mejora su resistencia a la oxidación. Forma una película densa de óxido de cromo en la superficie del acero, que actúa como un escudo fuerte y evita efectivamente que el oxígeno se difunda aún más en el interior del acero, protegiéndolo así de la oxidación. Mientras tanto, el cromo puede mejorar la resistencia y la dureza de la alta temperatura del acero, lo que hace que el acero resistente al calor sea más duradero a altas temperaturas.
El níquel (NI) puede mejorar significativamente la resistencia y la resistencia a la fatiga del acero. En ambientes de alta temperatura, el acero es propenso a las grietas de fatiga debido a varias tensiones. La adición de níquel puede mantener un buen rendimiento del acero bajo estrés repetido y evitar daños. Además, cuando el níquel se usa en combinación con el cromo, puede mejorar significativamente la resistencia a la oxidación y la resistencia a la corrosión del acero resistente al calor, lo que le permite funcionar de manera estable incluso en entornos corrosivos a alta temperatura de alta temperatura.
La función principal del molibdeno (MO) es mejorar la resistencia a la alta temperatura y la resistencia a la fluencia del acero. Bajo alta temperatura y carga a largo plazo, el acero sufrirá una deformación plástica lenta, a saber, el fenómeno de fluencia. El molibdeno puede suprimir de manera efectiva esta deformación, mejorar la durabilidad del acero a altas temperaturas y garantizar que el acero resistente al calor mantenga una forma y rendimiento estables durante la operación de alta temperatura a largo plazo.
Los elementos como Vanadium (V) y Titanium (TI) pueden formar pequeños carburos. Estos carburos se dispersan y distribuyen en la estructura del acero, desempeñan un papel en el fortalecimiento de la precipitación, como agregar innumerables "uñas" pequeñas al acero, mejorar su resistencia y dureza, y mejorar su rendimiento de alta temperatura.
Es el efecto sinérgico de estos elementos de aleación que dotan de acero resistente al calor con excelentes propiedades, lo que permite que se use ampliamente en muchos campos industriales de alta temperatura.